Quiero darte un gran consejo: si quieres ser un buen dueño, debes cuidar a tu perro. Sé que es muy difícil pero hay que hacer el esfuerzo.
También sé que al principio deseabas ese perro porque querías tener la experiencia de cuidar de alguien y, si al principio te decidiste, tienes que acabarlo, ¡no puedes dejarlo a medias!
Además, las personas, como los animales, tienen sentimientos. Es fácil cuidar de un perro porque es como cuidar a alguien a quien quieres y él a ti. Por eso, tienes que cuidarlo porque si no estará triste. Tienes que darle de comer, darle agua, sacarlo a pasear y, sobretodo, llevarlo al veterinario. Hay que cuidarlo porque a ti también te gustaría que te trataran bien; como mínimo, si yo fuera un perro, a mí me gustaría que me tratasen bien.
No puedes pegarle porque le harás daño, tampoco puedes insultarle. El perro estará siempre a tu lado y ¡será un buen amigo!
NO SEAS COBARDE. ¡NO LO MALTRATES! ESAS COSAS NO SE HACEN, NO TE GUSTARÍA ESTAR EN SU LUGAR.
Escrit per nens i nenes de 6 a 12 anys
que participen al Centre Obert la Salut Alta.
